TOXINA BOTULÍNICA

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Su función es reducir la contracción muscular, para que la piel luzca más relajada, lisa y uniforme contrarrestando líneas de expresión. Las principales zonas de aplicaciones suelen ser: entrecejo, frente, comisuras de los labios y contorno de los ojos. Sus efectos se observan plenamente 48 horas después del procedimiento y se prolongan hasta seis meses.

  • Relaja los músculos
  • Controla la sudoración
  • Elimina arrugas y previene su aparición
  • Efecto educador sobre la piel
  • Puede usarse todo el año
  • No deja marcas
  • No requiere prueba de alergias
APLICACIÓN:

En VAIMA las aplicaciones de toxina botulínica son exclusivamente efectuadas por nuestro director médico (cirujano plástico con más de cuarenta años de experiencia profesional), no derivamos bajo ninguna circunstancia dicha tarea en otros médicos ni asistentes. Es muy importante que este procedimiento sea ejecutado por un profesional experto en anatomía facial ya que una aplicación en el lugar incorrecto puede generar una expresión no deseada. También debe tenerse pleno conocimiento de las dosis aplicables a cada zona dado que un exceso de toxina podría generar graves daños en la salud del paciente.

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